En una acción desarrollada por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) de Antofagasta, un joven chileno de 19 años fue detenido bajo la acusación de infracción a la Ley de Armas, según informó el Ministerio Público. La detención tuvo lugar en el centro de Antofagasta, mientras los detectives realizaban diligencias de rutina. La alerta fue recibida de un transeúnte, quien reportó la presencia de un individuo manipulando un arma de fuego en la vía pública. Con esta información, los oficiales se dirigieron a la calle Manuel Antonio Matta, donde procedieron a realizar un control de identidad al sujeto en cuestión. Durante la revisión, conforme al Artículo 85° del Código Procesal Penal, se descubrió que el joven portaba un revólver a fogueo modificado de su estado original, conteniendo en su interior un cartucho calibre .38 especial. Este hallazgo llevó a la detención inmediata del individuo por flagrancia. Las autoridades trasladaron el arma y otros elementos encontrados al Laboratorio de Criminalística Regiona l, específicamente a la sección de Balística Forense, para realizar los análisis periciales correspondientes. Además, durante el procedimiento se recabaron otros antecedentes que fueron puestos a disposición del Ministerio Público. Este último dispuso que el detenido fuera presentado ante el Juzgado de Garantía de Antofagasta para la audiencia de control de detención.
En los primeros seis meses del año en curso, la Fiscalía Regional de Antofagasta ha reportado un preocupante incremento en la incidencia de delitos vinculados al uso de armamento, según revelan cifras entregadas por la Fiscalía de Análisis y Criminalidad Compleja (FACC). De acuerdo con el reporte, se registraron 492 ingresos por delitos relacionados con la Ley de Control de Armas y Explosivos (N° 17.798), marcando un aumento del 71% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se reportaron 287 denuncias. El tipo penal que ha experimentado el mayor incremento es el porte, tenencia o posesión de arma de fuego, seguido por casos de porte, tenencia o posesión de munición, así como otros delitos contemplados en la misma ley. Por el contrario, se observaron descensos en categorías como porte de arma prohibida, disparos injustificados en la vía pública y tenencia de armas prohibidas. El Fiscal Regional de Antofagasta, Juan Castro Bekios, expresó su preocupación ante estas cifras, destacando que reflejan una realidad palpable en el trabajo diario de la fiscalía. El uso de armas de fuego es un fenómeno que viene al alza en nuestra región y que va en línea con lo que hemos planteado muchas veces, respecto a que estamos enfrentando nuevos fenómenos criminales que requieren acciones firmes de todas instituciones vinculadas tanto a la prevención del delito, como a su persecución penal , afirmó el fiscal. Castro Bekios señaló que gran parte del armamento incautado en la región no cuenta con registro legal, sugiriendo que podría estar ingresando ilegalmente a través de la frontera, en contraste con lo observado en la zona central del país, donde muchas armas son robadas a sus propietarios. El fiscal también hizo mención de la preocupante tendencia de grupos criminales que se dedican a la fabricación de armas hechizas o a la adaptación de armas de fogueo para usar munición convencional, las cuales son empleadas en la comisión de delitos o comercializadas en el mercado negro. Hoy las armas de fuego , sean convencionales, adaptadas o hechizas, son un insumo transable en los mercados criminales, es decir, tienen un valor y aquel que las posee no sólo las emplea para comisión de delitos, sino que puede lucrar con ellas mediante su arriendo o venta a terceros, ya sea para actividades criminales o para defenderse de otras organizaciones , subrayó Castro Bekios. Para hacer frente a este fenómeno, la Fiscalía Regional ha implementado diversas estrategias, incluyendo la creación del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), dedicado a investigaciones de alto impacto, así como la Fiscalía de Análisis y Criminalidad Compleja (FACC), encargada de detectar y perseguir fenómenos criminales.
En una acción desarrollada por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) de Antofagasta, un joven chileno de 19 años fue detenido bajo la acusación de infracción a la Ley de Armas, según informó el Ministerio Público. La detención tuvo lugar en el centro de Antofagasta, mientras los detectives realizaban diligencias de rutina. La alerta fue recibida de un transeúnte, quien reportó la presencia de un individuo manipulando un arma de fuego en la vía pública. Con esta información, los oficiales se dirigieron a la calle Manuel Antonio Matta, donde procedieron a realizar un control de identidad al sujeto en cuestión. Durante la revisión, conforme al Artículo 85° del Código Procesal Penal, se descubrió que el joven portaba un revólver a fogueo modificado de su estado original, conteniendo en su interior un cartucho calibre .38 especial. Este hallazgo llevó a la detención inmediata del individuo por flagrancia. Las autoridades trasladaron el arma y otros elementos encontrados al Laboratorio de Criminalística Regiona l, específicamente a la sección de Balística Forense, para realizar los análisis periciales correspondientes. Además, durante el procedimiento se recabaron otros antecedentes que fueron puestos a disposición del Ministerio Público. Este último dispuso que el detenido fuera presentado ante el Juzgado de Garantía de Antofagasta para la audiencia de control de detención.
En los primeros seis meses del año en curso, la Fiscalía Regional de Antofagasta ha reportado un preocupante incremento en la incidencia de delitos vinculados al uso de armamento, según revelan cifras entregadas por la Fiscalía de Análisis y Criminalidad Compleja (FACC). De acuerdo con el reporte, se registraron 492 ingresos por delitos relacionados con la Ley de Control de Armas y Explosivos (N° 17.798), marcando un aumento del 71% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se reportaron 287 denuncias. El tipo penal que ha experimentado el mayor incremento es el porte, tenencia o posesión de arma de fuego, seguido por casos de porte, tenencia o posesión de munición, así como otros delitos contemplados en la misma ley. Por el contrario, se observaron descensos en categorías como porte de arma prohibida, disparos injustificados en la vía pública y tenencia de armas prohibidas. El Fiscal Regional de Antofagasta, Juan Castro Bekios, expresó su preocupación ante estas cifras, destacando que reflejan una realidad palpable en el trabajo diario de la fiscalía. El uso de armas de fuego es un fenómeno que viene al alza en nuestra región y que va en línea con lo que hemos planteado muchas veces, respecto a que estamos enfrentando nuevos fenómenos criminales que requieren acciones firmes de todas instituciones vinculadas tanto a la prevención del delito, como a su persecución penal , afirmó el fiscal. Castro Bekios señaló que gran parte del armamento incautado en la región no cuenta con registro legal, sugiriendo que podría estar ingresando ilegalmente a través de la frontera, en contraste con lo observado en la zona central del país, donde muchas armas son robadas a sus propietarios. El fiscal también hizo mención de la preocupante tendencia de grupos criminales que se dedican a la fabricación de armas hechizas o a la adaptación de armas de fogueo para usar munición convencional, las cuales son empleadas en la comisión de delitos o comercializadas en el mercado negro. Hoy las armas de fuego , sean convencionales, adaptadas o hechizas, son un insumo transable en los mercados criminales, es decir, tienen un valor y aquel que las posee no sólo las emplea para comisión de delitos, sino que puede lucrar con ellas mediante su arriendo o venta a terceros, ya sea para actividades criminales o para defenderse de otras organizaciones , subrayó Castro Bekios. Para hacer frente a este fenómeno, la Fiscalía Regional ha implementado diversas estrategias, incluyendo la creación del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), dedicado a investigaciones de alto impacto, así como la Fiscalía de Análisis y Criminalidad Compleja (FACC), encargada de detectar y perseguir fenómenos criminales.