Durante la jornada de este jueves se confirmó una “ralentización indefinida” de los servicios de los funcionarios de la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC) desde mañana viernes 15 de noviembre a contar de las 08:00 horas y regirá para todos los aeropuertos de Chile. Esto significa que los servicios de los aeropuertos van a ser ralentizados, pero no suspendidos, lo que resultará en un aumento del flujo de pasajeros que no van a poder abordar sus aviones a la hora que corresponde en los terminales aéreos. La movilización responde, entre otras cosas, a la e xclusión de un bono de fiscalización en el presupuesto 2025, lo que el sindicado aeronáutico traduce como una falta de compromiso por parte de las autoridades.“Este bono de fiscalización fue pactado en mayo de 2024, después de una larga mesa de trabajo que culminó en noviembre de 2023. Sin embargo, en el presupuesto 2025 no se reflejó el acuerdo”; explica Gonzalo Acuña, presidente de la Asociación.“Queremos demostrar que el servicio que ofrecemos es superior al estándar exigido, pero esta vez lo haremos sin apurar el sistema”, concluyó. Para concluir, desde los sindicatos realizaron el siguiente emplazamiento “el llamado a la autoridad es a detener las movilizaciones y negociar una solución realista que permita su sostenibilidad en el tiempo”.
Una alerta de bomba generó una rápida evacuación de todos los pasajeros en el Aeropuerto Internacional El Loa de Calama la mañana de este viernes. La alarma se produjo debido a la presencia de un equipaje abandonado en una de las áreas del aeropuerto, lo que provocó la inmediata intervención del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE). La situación obligó a que los pasajeros fueran trasladados al estacionamiento del recinto mientras el GOPE realizaba el procedimiento de seguridad correspondiente. Como resultado de esta evacuación, varios vuelos sufrieron retrasos y algunos fueron suspendidos, afectando los planes de viaje de numerosos pasajeros.
Durante la jornada de este jueves se confirmó una “ralentización indefinida” de los servicios de los funcionarios de la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC) desde mañana viernes 15 de noviembre a contar de las 08:00 horas y regirá para todos los aeropuertos de Chile. Esto significa que los servicios de los aeropuertos van a ser ralentizados, pero no suspendidos, lo que resultará en un aumento del flujo de pasajeros que no van a poder abordar sus aviones a la hora que corresponde en los terminales aéreos. La movilización responde, entre otras cosas, a la e xclusión de un bono de fiscalización en el presupuesto 2025, lo que el sindicado aeronáutico traduce como una falta de compromiso por parte de las autoridades.“Este bono de fiscalización fue pactado en mayo de 2024, después de una larga mesa de trabajo que culminó en noviembre de 2023. Sin embargo, en el presupuesto 2025 no se reflejó el acuerdo”; explica Gonzalo Acuña, presidente de la Asociación.“Queremos demostrar que el servicio que ofrecemos es superior al estándar exigido, pero esta vez lo haremos sin apurar el sistema”, concluyó. Para concluir, desde los sindicatos realizaron el siguiente emplazamiento “el llamado a la autoridad es a detener las movilizaciones y negociar una solución realista que permita su sostenibilidad en el tiempo”.
Una alerta de bomba generó una rápida evacuación de todos los pasajeros en el Aeropuerto Internacional El Loa de Calama la mañana de este viernes. La alarma se produjo debido a la presencia de un equipaje abandonado en una de las áreas del aeropuerto, lo que provocó la inmediata intervención del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE). La situación obligó a que los pasajeros fueran trasladados al estacionamiento del recinto mientras el GOPE realizaba el procedimiento de seguridad correspondiente. Como resultado de esta evacuación, varios vuelos sufrieron retrasos y algunos fueron suspendidos, afectando los planes de viaje de numerosos pasajeros.