En una sesión del concejo municipal realizada el pasado miércoles 10 de julio, el alcalde Jonathan Velásquez anunció que el edificio Arrecife, una de las estructuras principales del Balneario Municipal, será demolido debido a sus graves fallas estructurales. Según el jefe comunal, el estado del edificio es tan deteriorado que no es posible realizar reparaciones o remodelaciones viables. Velásquez explicó que el edificio, que originalmente funcionaba como baños públicos antes de ser adaptado para locales comerciales, se encuentra en condiciones muy inseguras. El lugar ya está irreparable, irrecuperable, por lo tanto, se tendrá que demoler , afirmó el alcalde. La decisión llega tras un complejo proceso que incluyó una evaluación normativa realizada por Secoplan, recogida por El Mercurio de Antofagasta, y una solicitud de información del senador Pedro Araya a la municipalidad. Según el informe de febrero de 2024, el edificio carece de recepción de obras por parte de la Dirección de Obras Municipales, debido a modificaciones no regularizadas realizadas por terceros. Además, el inmueble no cumple con los estándares necesarios para su techo ni para las instalaciones de gas, eléctricas y sanitarias. La situación se ha agravado con la presencia de aguas servidas en los alrededores, lo que llevó a la seremi de Salud a dictar un sumario sanitario y clausurar el edificio. Esta problemática ha estado sin solución durante más de un año y ha generado conflictos judiciales con los comerciantes de los locales concesionados, además de problemas adicionales como el abandono del edificio, asentamiento de personas en situación de calle y la presencia de aguas servidas. Durante la sesión del concejo, el concejal Camilo Kong solicitó información sobre la situación del edificio, recibiendo detalles sobre el informe que confirma la necesidad de su demolició n. Por su parte, el concejal Luis Aguilera criticó la administración municipal, acusándola de negligencia en la gestión del edificio. Aguilera cuestionó la falta de acuerdos y soluciones por parte de la administración, y mencionó que de las 11 causas judiciales relacionadas, 9 ya han sido cerradas con sentencia.
En una sesión del concejo municipal realizada el pasado miércoles 10 de julio, el alcalde Jonathan Velásquez anunció que el edificio Arrecife, una de las estructuras principales del Balneario Municipal, será demolido debido a sus graves fallas estructurales. Según el jefe comunal, el estado del edificio es tan deteriorado que no es posible realizar reparaciones o remodelaciones viables. Velásquez explicó que el edificio, que originalmente funcionaba como baños públicos antes de ser adaptado para locales comerciales, se encuentra en condiciones muy inseguras. El lugar ya está irreparable, irrecuperable, por lo tanto, se tendrá que demoler , afirmó el alcalde. La decisión llega tras un complejo proceso que incluyó una evaluación normativa realizada por Secoplan, recogida por El Mercurio de Antofagasta, y una solicitud de información del senador Pedro Araya a la municipalidad. Según el informe de febrero de 2024, el edificio carece de recepción de obras por parte de la Dirección de Obras Municipales, debido a modificaciones no regularizadas realizadas por terceros. Además, el inmueble no cumple con los estándares necesarios para su techo ni para las instalaciones de gas, eléctricas y sanitarias. La situación se ha agravado con la presencia de aguas servidas en los alrededores, lo que llevó a la seremi de Salud a dictar un sumario sanitario y clausurar el edificio. Esta problemática ha estado sin solución durante más de un año y ha generado conflictos judiciales con los comerciantes de los locales concesionados, además de problemas adicionales como el abandono del edificio, asentamiento de personas en situación de calle y la presencia de aguas servidas. Durante la sesión del concejo, el concejal Camilo Kong solicitó información sobre la situación del edificio, recibiendo detalles sobre el informe que confirma la necesidad de su demolició n. Por su parte, el concejal Luis Aguilera criticó la administración municipal, acusándola de negligencia en la gestión del edificio. Aguilera cuestionó la falta de acuerdos y soluciones por parte de la administración, y mencionó que de las 11 causas judiciales relacionadas, 9 ya han sido cerradas con sentencia.