Este martes, el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, hizo noticia tras haber suscrito diversos acuerdos migratorios con el secretario de del Departamento de Estado de Estados Unidos (EE.UU.), Marco Rubio, en los que acepta recibir en su megacárcel a criminales detenidos en prisiones estadounidenses, incluyendo miembros venezolanos del Tren de Aragua. Cabe destacar que un acuerdo de esta índole “no tiene precedentes” en la historia de las relaciones entre EE.UU. y América Latina, y se dio en el marco de la visita oficial del jefe de la diplomacia norteamericana a suelo salvadoreño. Se alcanzaron múltiples acuerdos para luchar contra las olas de migración masiva ilegal que actualmente desestabilizan toda la región”, señaló la portavoz del jefe de la diplomacia estadounidense, Tammy Bruce. A través de un comunicado, el personero de gobierno agregó que Bukele acordó “recibir de regreso a todos los pandilleros salvadoreños MS-13 (Mara Salvatrucha) que se encuentran en Estados Unidos ilegalmente ”.Estos serán trasladados a la famosa cárcel de máxima seguridad de El Salvador, llamada Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot). Por su parte, el Mandatario centroamericano señaló que “estamos finalizando, creo que lo va a anunciar el secretario (del Departamento de Estado), estamos anunciando un acuerdo que va a ser mucho más importante, en el mismo tema, y un alcance mucho mayor que esos acuerdos que existieron en 2019″, sostuvo ante la prensa al ser consultado sobre si “habrá acuerdo de tercer país seguro”. Asimismo, Bukele hizo alusión así a los pactos alcanzados ese año entre Estados Unidos y Guatemala, Honduras y El Salvador -si bien sólo se implementó en el primero de ellos-, que permitía a las autoridades estadounidenses -entonces bajo el primer mandato de Donald Trump- deportar a migrantes a estos Estados centroamericanos si antes no habían solicitado asilo en el país de tránsito al que llegasen. “Si lo terminamos de cerrar, lo dirá el secretario, pero en tal caso es un acuerdo muchísimo mayor que no tiene precedentes en la historia de las relaciones, no solo de Estados Unidos con El Salvador sino con América Latina”, indicó en unas declaraciones recogidas por el diario salvadoreño El Mundo. Con todo, el jefe de estado de El Salvador añadió que es “un buen momento para fortalecer la relación” con Estados Unidos, puesto que, según ha dicho, se trata de la “relación más importante que tenemos”, cerró.
Este martes, el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, hizo noticia tras haber suscrito diversos acuerdos migratorios con el secretario de del Departamento de Estado de Estados Unidos (EE.UU.), Marco Rubio, en los que acepta recibir en su megacárcel a criminales detenidos en prisiones estadounidenses, incluyendo miembros venezolanos del Tren de Aragua. Cabe destacar que un acuerdo de esta índole “no tiene precedentes” en la historia de las relaciones entre EE.UU. y América Latina, y se dio en el marco de la visita oficial del jefe de la diplomacia norteamericana a suelo salvadoreño. Se alcanzaron múltiples acuerdos para luchar contra las olas de migración masiva ilegal que actualmente desestabilizan toda la región”, señaló la portavoz del jefe de la diplomacia estadounidense, Tammy Bruce. A través de un comunicado, el personero de gobierno agregó que Bukele acordó “recibir de regreso a todos los pandilleros salvadoreños MS-13 (Mara Salvatrucha) que se encuentran en Estados Unidos ilegalmente ”.Estos serán trasladados a la famosa cárcel de máxima seguridad de El Salvador, llamada Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot). Por su parte, el Mandatario centroamericano señaló que “estamos finalizando, creo que lo va a anunciar el secretario (del Departamento de Estado), estamos anunciando un acuerdo que va a ser mucho más importante, en el mismo tema, y un alcance mucho mayor que esos acuerdos que existieron en 2019″, sostuvo ante la prensa al ser consultado sobre si “habrá acuerdo de tercer país seguro”. Asimismo, Bukele hizo alusión así a los pactos alcanzados ese año entre Estados Unidos y Guatemala, Honduras y El Salvador -si bien sólo se implementó en el primero de ellos-, que permitía a las autoridades estadounidenses -entonces bajo el primer mandato de Donald Trump- deportar a migrantes a estos Estados centroamericanos si antes no habían solicitado asilo en el país de tránsito al que llegasen. “Si lo terminamos de cerrar, lo dirá el secretario, pero en tal caso es un acuerdo muchísimo mayor que no tiene precedentes en la historia de las relaciones, no solo de Estados Unidos con El Salvador sino con América Latina”, indicó en unas declaraciones recogidas por el diario salvadoreño El Mundo. Con todo, el jefe de estado de El Salvador añadió que es “un buen momento para fortalecer la relación” con Estados Unidos, puesto que, según ha dicho, se trata de la “relación más importante que tenemos”, cerró.